Hoy os traigo uno de los cócteles más simples que podéis imaginar, pero también es uno de los más deliciosos y románticos que encontraréis jamás.
Si estáis preparando una cita romántica existen dos ingredientes que no pueden faltar: las fresas y el champán. Estos dos ingredientes unidos pueden conseguir que la noche sea “perfecta”.
Y es que hablo por experiencia propia… Durante unas vacaciones en París, conocí a un hombre maravilloso que, como buen parisino, el tema del romanticismo lo llevaba a la máxima expresión. Así que después de una cena romántica en Montmartre, como guinda final a la noche preparó en su apartamento, el cóctel que os traigo hoy: las fresas doradas. Intrigante nombre, ¿verdad?
La elaboración de este cóctel es muy simple y el resultado es realmente fantástico, así que si tenéis una cita o queréis sorprender a vuestra pareja en una ocasión especial, este es el cóctel perfecto.
El champán siempre ha sido una bebida glamourosa, consumida de manera habitual por las clases altas. Sin embargo, también se relaciona siempre con el romanticismo y las ocasiones especiales, así que si queréis unir todos estos detalles en un solo instante, ya sabéis.
La magia se encuentra siempre en el sitio que nosotros queramos, así que esta es una buena manera de hacerlo.
¿Os animáis? Seguro que sí. Os prometo que los resultados serán inolvidables.